jueves, 7 de junio de 2012

cambio climatico


Cambio Climático

La punta del iceberg de un modelo insostenible

El mundo está cambiando. La crisis económica, ambiental y social son diferentes manifestaciones de un modelo de desarrollo insosteniblebasado en los principios de explotación de los recursos para extraer el máximo beneficio en el menor tiempo posible, sin considerar el impacto que esto genera en los ecosistemas y las poblaciones.

El cambio climático es solo la punta del iceberg de este modelo insostenible. Hace más de 20 años, los científicos comenzaron a alertar del aumento de la temperatura media global y su impacto en el complejo sistema climático.
En 1988 se creó el Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC) que hasta la fecha ha publicado 4 informes que confirman la evidencia de estos cambios en el clima y su correlación directa con las actividades humanas.

¿Por qué se está calentando el planeta?

El cambio climático está ocasionado principalmente por la quema de combustibles fósiles (carbón, petróleo y gas) que en su combustión para producir energía liberan CO2 a la atmósfera. Desde la revolución industrial, el modelo de desarrollo ha tenido como motor estas fuentes de energía. Sin embargo, los impactos ambientales que produce este modelo, así como lo costoso del mismo, hacen necesaria la transición hacia un modelo energético basado en el ahorro, la eficiencia, las energías renovables y la justicia social. 

Una responsabilidad global

Al ser el cambio climático un problema global se necesita el acuerdo y la participación de todos los países. Lamentablemente, los gobiernos no están respondiendo a este reto con la urgencia y la ambición necesaria, como vimos con el débil acuerdo al que se llegó en la última Cumbre de Cambio Climático de Dúrban. Los responsables políticos esconden la cabeza, miran hacia otro lado más preocupados por el corto plazo y por seguir manteniendo el status quo, que por cambiar realmente el rumbo.

¿Qué propone WWF?


WWF trabaja en dos líneas de acción para combatir los efectos del cambio climático

• Mitigación:
Combatir el cambio climático requiere una transición urgente hacia un modelo energético basado en la eficiencia y en la equidad, así como en la apuesta decidida por las energías renovables. Las medidas de ahorro y eficiencia, así como las energías renovables, favorecen un desarrollo autóctono y disminuyen la dependencia exterior.

• Adaptación:
No estamos abocados a un cambio climático catastrófico. Los impactos ecológicos, sociales y económicos dependerán de las medidas de adpatación que se tomen para reducir las emisiones de GEI. 

jueves, 8 de marzo de 2012

Francia contra el maíz transgénico








El gobierno francés solicitó ayer a la Comisión Europea que suspenda la autorización para cultivar el maíz transgénico desarrollado por el grupo estadounidense Monsanto, identificado por la sigla MON810, por el riesgo que, asegura, supone para el medio ambiente. El reclamo se formula después de una sucesión de controversias administrativas y judiciales, por las cuales las autoridades del Ejecutivo francés ya habían intentado prohibir el cultivo, pero un tribunal determinó que una decisión así sólo era facultad de la autoridad europea.
La petición enviada ayer a la Comisión Europea “se apoya en los últimos estudios científicos y en una notificación de la Autoridad Europea para la Seguridad Alimentaria (AESA) del pasado diciembre, que demuestran que el cultivo de ese maíz presenta riesgos importantes para el medio ambiente”, señala la nota del Ministerio de Agricultura galo que acompaña el reclamo.
Dicha cartera recuerda que el Ejecutivo francés, encabezado por el presidente Nicolas Sarkozy, ya había manifestado su oposición al uso de ese tipo de semillas el pasado 28 de noviembre. El argumento que ofreció entonces el jefe de gobierno para rechazar el uso de esa variedad de organismo genéticamente modificado (OGM) era que “el objetivo de la agricultura francesa es la calidad, que se sustenta en la confianza del consumidor”.
Pero con posterioridad a esta decisión, la Justicia falló a favor de Monsanto, autorizando su cultivo, pese a lo cual el gobierno francés aplicó una cláusula de salvaguarda por la que mantuvo prohibido el uso de la semilla. Esta resolución, aunque en la práctica está vigente, tiene una legalidad precaria, al punto de que fue cuestionada por el Consejo de Estado de Francia, el más alto órgano administrativo. Es por ello que ahora el gobierno francés busca el respaldo de una decisión de la Comisión Europea.
Este organismo autorizó, durante el año pasado, solamente el cultivo de dos tipos de OGM, el maíz MON810 y la papa Amflora, de la alemana BASF, pero esta última anunció en enero que dejará de comercializar y desarrollar transgénicos en la UE, dado el rechazo de la opinión pública y de varios gobiernos.